Los astrónomos no se ponen de acuerdo, en si es un cometa, Júpiter, una supernova, una alineación de planetas o algún otro objeto brillante que aún no hemos identificado. Lo que sí sabemos es que los Reyes Magos, que son muy sabios y saben mucho de astronomía, miran al cielo y saben el camino que deben seguir.

Estela, cuando anochece sube al cielo y brilla muuucho para que los Reyes la encuentren, gasta mucha energía brillando, por eso cuando amanece, Estela busca una familia que la acoja para descansar. La familia que la acoge en su casa la descubrirá cada mañana en un lugar distinto ya que cuando vuelve del cielo cae cada mañana en un lugar diferente.

Estela es mágica, como los Reyes, por eso está en contacto con ellos y cuando sube al cielo por las noches les cuenta lo que ha visto en vuestras casas y transmite a los Reyes vuestros mensajes. No le gusta nada que la toquéis porque necesita descansar durante el día. Hay veces que al tocarla pierde la magia, entonces hay que volver a leer el libro para que vuelva a ser mágica.

Cuidadla bien cuando esté en vuestra casa, dejadla descansar y contadle lo que pensáis porque le encanta. Hay veces que si tiene tiempo hace trastadas por la casa, podéis ver algunas que hemos fotografiado para que veáis lo traviesa que es a veces.

Los Reyes Magos se llaman Melchor, Gaspar y Baltasar. Ni los científicos ni los historiadores pueden demostrar exactamente quien son, ya que según la tradición son magos.

Se sabe que además de magos son sabios, por ejemplo en inglés se llaman The three wise men (los tres hombres sabios). Son sabios porque saben mucho de muchas cosas pero sobre todo de astronomía. Saben distinguir las estrellas y gracias a esto saben orientarse en lugares muy difíciles como el desierto o el mar.

Los Reyes magos llevan camellos porque son unos animales que pueden llevar mucha carga, con lo que pesan los regalos ¡es muy buena idea!

Tienen muchos ayudantes a quienes llaman pajes porque es mucho trabajo y un viaje muy largo. Los pajes se ocupan de muchas cosas pero sobre todo de entrenar a los camellos para que estén preparados para el viaje.

¿Sabes cómo hay que cuidar a los camellos?

Hay que darles mucha agua, pueden beber hasta 200 litros de una vez, pero luego son capaces de aguantar en el desierto hasta 10 días sin beber agua.

Además, aunque no lo parece ¡son unos animales muy rápidos! Pueden llegar a correr hasta 65km/hora. Eso es como un coche, por eso los reyes van tan rápido (aunque pensamos que la magia también les ayuda).

Se cuenta que la primera vez que dieron regalos a un niño fue al niño Jesús de Nazaret y fue muy sorprendente que a un niño muy pobre que había nacido en un establo vinieran tres Reyes y le regalaran oro, incienso y mirra. Desde entonces, los Reyes van a muchas casas donde hay niños y siguen haciéndoles regalos.

Hay veces que los Reyes no pueden llegar a todas las casas de todos los niños por eso, si tienes la suerte de recibir regalos tienes que estar muy contento y agradecido.